“Se me cayó el mundo”: el dolor y la furia del padre del joven atropellado en Av. del Carnaval

La muerte de Santiago Liquín, de 25 años, continúa generando conmoción en Salta. Su padre, Saúl Liquín, expresó públicamente el profundo dolor y la indignación que siente tras el incidente ocurrido en la avenida del Carnaval, donde el joven fue atropellado por un conductor que manejaba totalmente ebrio y que, según los testimonios, intentó escapar del lugar.

Santiago circulaba en su motocicleta rumbo a buscar un vehículo para trabajar como chofer de aplicaciones. Nunca llegó: minutos después, un automóvil lo embistió de frente.

“Se me cayó el mundo”: el momento en que recibió la noticia

Saúl Liquín, en PUE!, contó que al momento del siniestro se encontraba en Orán, trabajando como chofer de larga distancia. En medio del viaje, envió un mensaje a su hijo preguntándole dónde estaba, sin imaginar que minutos después recibiría el peor llamado de su vida.

“A las 0:20 su mamá me manda un mensaje para que la atienda… cuando nos pudimos contactar me dice que lo habían atropellado. Se me cayó el mundo, se me derrumbó todo”, relató conmovido.
Según explicó, Santiago estaba yendo a buscar un auto para generar dinero y así poder realizar un viaje planeado para ese mismo día. “Iba a hacerse unos mangos para el viaje”, recordó.

De acuerdo con los testimonios recogidos por la familia, el conductor del auto habría realizado un sobrepaso en una zona de doble línea amarilla, donde la velocidad máxima permitida es de 60 km/h.

“Venía en contramano, porque le da de frente”, explicó Saúl, quien remarcó que la combinación de velocidad, imprudencia y alcohol hacía inevitable un desenlace trágico. El test de alcoholemia confirmó que el acusado conducía con 1,36 gramos de alcohol en sangre, casi tres veces el límite permitido.

Lo que más indignó a la familia fue la actitud del conductor luego del impacto. Saúl definió la reacción como “tremenda” y aseguró que los testigos aportaron detalles clave.

Según relataron quienes estaban en el lugar, entre ellos una pareja de policías en moto y otras personas que circulaban por la zona, el hombre nunca pidió ayuda. “En ningún momento sacó el teléfono para pedir una ambulancia. Intentó escaparse”, afirmó el padre.

Tras el choque, el acusado habría intentado encender su vehículo para huir. Al no lograrlo, saltó un alambrado hacia una zona agrícola para escapar corriendo, pero fue perseguido y reducido por un policía y un vecino.

“Esto es un homicidio”: el reclamo por la pena máxima

Con el acompañamiento del abogado Omar Sosa, quien actúa como querellante, Saúl Liquín exige que la causa se agrave y no sea tratada como un simple siniestro vial.

“Yo creería que es un homicidio, porque hay gente que le dijo que no se suba al auto y él igual se subió. Vos querés la pena más alta en esto, homicidio”, afirmó.

El padre pidió que el fiscal considere todos los testimonios, peritajes y antecedentes que rodean el hecho para definir una acusación acorde a la gravedad del caso.

Santiago Liquín falleció tras ser trasladado al hospital y sometido a una intervención quirúrgica. Su muerte se suma a la creciente lista de víctimas fatales en las rutas y avenidas de Salta, un problema que nuevamente abre el debate sobre la imprudencia y el consumo de alcohol al volante.